viernes, 28 de enero de 2011

LOS PUEBLOS SE LEVANTAN Y HAN ECHADO A ANDAR..



TUNEZ: VUELVE A SACUDIRSE EL CONTINENTE

Revista Insurrección 252
lunes, 24 de enero de 2011

Túnez es un país situado entre Argelia y Libia, al norte del África, con costas en el mar Mediterráneo, de 163 mil kilómetros cuadrados y con una población aproximada de 11 millones. Nació independiente en 1956, cuando Francia, que aun tutela la vida tunecina, obligada, otorgó ese status, producto de levantamientos populares y de la lucha armada por la liberación nacional en la década del 50.

En su desarrollo político, se construyó prácticamente un régimen de Partido único, que llevó a Túnez a una democracia restringida, donde en su historia republicana solo ha tenido tres presidentes. Con un control férreo de la información, reprimiendo con cárcel cualquier disidencia, el régimen tunecino mantuvo una "paz" de la cual se vanagloriaba en medio de las calamidades que todos conocen del mundo árabe.

Un régimen de carácter autoritario

Su primer presidente Habib Bourguiba, padre de la Patria, tuvo el carácter de Vitalicio. El que acaba de huir, producto de manifestaciones populares continuas y gigantescas, llevaba 23 años en el poder. Los últimos años trajeron , al quebrar el modelo de estado árabe-musulmán, que debe responder por el bienestar de la población, y abrir sus puertas al capital extranjero, la peor crisis económica en su historia y la profundización de las protestas.

La caída del gobierno de Zine el Abidine Ben Alí, denominado por muchos una cleptocracia, policíaca y criminal, tomó por sorpresa a sus aliados occidentales, EEUU y Francia. El País de la Sonrisa, así era conocido entre los turistas europeos, aplicó con verdadero esmero las recetas del Fondo Monetario Internacional. Sabemos los nuestramericanos que solo con control férreo a la oposición, mordaza a la información y un régimen de miedo y terror implementado por la estructura de Terrorismo de Estado, es posible que el pueblo se someta al empobrecimiento y a la desigualdad. Pero todo tiene un límite.

Rebelión popular

No se esperaban la respuesta masiva, callejera y profundamente democratizadora del pueblo tunecino. Era el lugar de África donde menos se vislumbraba la rebelión. Múltiples factores, revelan ahora los analistas, causaron esta sorpresa hermosa que esta en plena efervescencia y solo lleva 10 días de evolución.

El pueblo sigue en las calles, las bandas asesinas paramilitares continúan disparando contra el pueblo y robando sus pertenencias, la policía es controlada por el Ejercito, la recomposición del régimen se manifiesta, los tunecinos y tunecinas exigen una nueva organización social, una reforma profunda a las costumbres políticas, libertades ciudadanas y desmantelamiento de las estructura del Terrorismo de Estado.

El levantamiento ya llamado Intifada Tunecina, tuvo como detonante la inmolación con fuego de un joven profesional que desempleado vendía frutas en las calles de Túnez. La policía reprime al joven y le impide seguir con lo único que podía hacer en una país en recesión, con altas tasas de desempleo, que cuenta con una franja amplia de profesionales jóvenes, pero que no les ofrece futuro, en medio de la crisis regional y global, que les impide movilidad.

Los barrios pobres de Túnez se incendiaron también. Los vendedores ambulantes, los desempleados jóvenes, muchos de ellos profesionales se vieron en la figura de este joven. Empezó en la capital la revuelta pero se extendió rápidamente a todo el país. El sindicato más grande y de corte oficial, fue obligado a citar a huelga general para el pasado 14 de enero y el régimen autocrático no resistió horas, huyendo toda la familia presidencial y algunos de los más odiados ministros al exterior. Cientos de muertos, previos al llamado de huelga general, y quince días de combate en las calles contra las bandas paramilitares del régimen y su policía..

Por ahora han salido casi 2.000 presos políticos de las cárceles del régimen. Se cuentan por miles los muertos productos de decenas de años de represión y terror.

Poder constituyente

El pueblo tunecino esta componiendo su programa mínimo: Justicia para las victimas, cárcel para los torturadores; que se vayan todos los que participaron en el gobierno de Ben Ali; que el producto del robo continuado por la familia de Ben Ali se restituya al pueblo; que los acuerdos económicos con el FMI y con Francia y la Unión Europea se recindan y como salida el poder constituyente del pueblo: una nueva Constitución producto de una Asamblea que reescriba el acuerdo social, para una nueva época que se abre.

Los tunecinos y tunecinas están escribiendo sin guión una nueva historia. El Continente africano, su mundo árabe ve con sorpresa y alegría este estallido de vida y libertad. Ningún régimen por más terror y muerte que infrinja, está blindado ante la fuerza descomunal de su pueblo decidido a transformar las estructuras de opresión y miseria. Ninguna máscara puede ocultar la verdad, ni la mentirosa libertad de prensa de Occidente, ni la mordaza criminal que tenia el régimen de Ben Ali.

En Túnez vuelve a sacudirse el continente, dormía, ya despertó, camina.


RUMBO AL ESTADO COMUNAL

No hay comentarios:

Publicar un comentario