jueves, 1 de noviembre de 2018

LA ECONOMíA POLÍTICA DE LAS COMUNAS

 27/10/2018
Ponencia presentada en el Seminario Poder Popular y Política Económica
Por: Atenea Jiménez Lemon

Nota: Las breves lineas que se exponen a continuación son fruto de la praxis  en la conformación de comunas, consejos comunales, consejos campesinos, consejos de trabajadores, desde la Red Nacional de Comuneras y Comuneros.

El modo de producción comunal persigue el bien común, mientras el capitalismo tiene como fin la acumulación de riquezas en pocas manos, y el socialismo burocrático, la centralización para "redistribuir" los excedentes, con todas las desviaciones que en la realidad concreta se han experimentado. En el socialismo desde abajo, desde las comunas y en general desde los consejos, la producción social se plantea con estructuras y funcionamiento cuya prioridad es el ser humano (todo lo viviente) y no el capital, los excedentes se distribuyen socialmente, la clave de la toparquía esta en la democracia directa, en la forma como se decide el destino del fruto del trabajo, la manera en que nos organizamos para “producir y reproducir la vida”, la “forma al fin descubierta de gobierno de los trabajadores” (Marx dixit).

Algunos elementos centrales de la economía política de las comunas:

1.- Propiedad de los medios de producción: en este modo de producción, planteamos que predomine la propiedad social directa comunal, coexistiendo con otros tipos de propiedad, reconociendo a la propiedad privada e incorporando a todos los medianos y pequeños dueños de medio de producción a la comuna, creando alianzas con empresas de propiedad social mixtas donde participen campesinos, trabajadores, pescadores, pequeños y medianos propietarios, con las empresas autogestionadas por trabajadores y con empresas estatales.
Las relaciones sociales que se dan en los medios de producción comunal están caracterizadas por la cooperación y no por la competencia, por la ayuda mutua, por el intercambio de saberes y la promoción del desarrollo de las potencialidades humanas, para aportar en una nueva racionalidad y espiritualidad del trabajador que trascienda al  sujeto mismo como mercancía, el endiosamiento de los productos del trabajo humano y el mercado como "ordenador" de la vida. En el entendido que cada comunero es un trabajador y que cada trabajador debe ser progresivamente un comunero, una comunera.

En Venezuela tenemos propiedad comunal de tierras con vocación agrícola, empresas, maquinaria, transportes comunales, bancos comunales, pero también aportan a la comuna, los campesinos que son dueños de sus tierras y de maquinaria, productores agrícolas que tienen trabajadores también, pescadores que son pequeños propietarios, entre otros. La enseñanza de todo este tiempo es la incorporación de todas las fuerzas productivas en sus diversas formas y tipo de propiedad, para generar riqueza, porque el socialismo debe generar riqueza, atendiendo al principio “ a cada cual según su trabajo”.

2.- Producir para satisfacer necesidades y no al mercado:

“La riqueza de las sociedades en que impera el régimen capitalista de producción se nos aparece como un inmenso arsenal de mercancías” Carlos Marx.

En el capitalismo todo se vuelve mercancía, el propio trabajador es una mercancía, en la comuna se plantea producir para satisfacer las necesidades humanas, sabiendo éstas son infinitas, la clave está en consolidar un modo de producir basado en los valores de uso, armonizado con la naturaleza.

Hemos dado largos debates sobre los valores de uso y los valores de cambio, sobre la produción en función del ser humano y no del mercado que hasta impone las “necesidades”, en tal sentido las comunas se plantearon en un primer momento usar trueke y monedas comunales como ejercicio para una economía que promoviera el intercambio de bienes y servicios desde una visión anticapitalista, sin embargo, poco a poco fue dando paso a una dinámica mas ancestral que no significaba un evento de trueke, sino mas bien una manera de relacionarse  comuna a comuna permanentemente, hoy tenemos intercambio de producción y bienes desde falcón a Portuguesa, de Lara a Caracas, desde Apure a Lara, ese ejercicio se mantiene autogestionariamente y sin la participación ni apoyo del estado ni del sector privado.

En la idea de producir para satisfacer necesidades comenzamos a emprender la critica sobre el capitalismo y sus diversos mecanismos de control y reproducción del sistema, en ese sentido, se plantea que ningún comunero debe explotar a otro, la producción para satisfacer necesidades debe considerar a todo lo viviente, la madre naturaleza entra también en la nueva forma de relacionarnos. Como ejemplo tenemos el tema alimentario, en el mundo capitalista se produce para vender y enriquecerse, no para alimentar a la humanidad, en la comuna se produce para alimentarnos en el contexto de nuestra cultura, comprendiendo también que en la medida en que construimos comuna estamos construyendo una cultura.

Nadie puede pensar que la conformación de comunas es perfecta, que todo lo que hemos debatido y que acordamos como principios se cumple a cabalidad, las comunas tienen sus propios demonios también, sin embargo, hay elementos edificados que poco se han estudiado. Vale decir, en la producción campesina, las cadenas que se rompen cuando un campesino decide comprometer socialmente la producción en la comuna y no con el intermediario privado a quien tiene toda la vida vendiéndole, significa un salto enorme de siglos de opresión. Ello sintetiza producir para satisfacer necesidades.

También como principio es imprescindible satisfacer primero las necesidades de la comuna y el excedente intercambiarlo con otras comunas o colocarlo en el sistema popular distribución, rompiendo con lo que generalmente sucedía inclusive promovido por el estado, que la cosecha de maíz de un territorio nunca regresa en forma de harina procesada. También ocurre con el arroz y otros rubros.

En este orden ideas, hemos promovido la producción en comunas que antes no tenían experiencia en el área, comunas netamente urbanas que luego de un proceso de intercambio de experiencias y de lucha popular, hoy poseen tierras comunales y se encuentran produciendo. Queremos llegar hasta la planificación de la producción con alianzas entre comunas, por ejemplo, las comunas urbanas que invierten para producir con comunas que tienen tierra y experiencia.                  

3.- Relaciones sociales de producción libres de explotación. Como principio ningún comunero debe explotar a otro, planteamos la asociación de productores libres, el desarrollo de las potencialidades humanas promoviendo la vocación de los seres humanos, cuando una empresa es comunal las relaciones sociales de producción se dan bajo los principios de ayuda mutua, de intercambio de saberes, de rotación en los roles, procurando la horizontalidad en las estructuras de gestión, que todos aprendan de todo lo que se hace en la empresa, para ello se instalaron las aulas campesinas comuneras, para comunalizar el saber, para difundirlo.

En este sentido, vemos a todos los trabajadores y trabajadoras como protagonistas no solo de la empresa, de la tierra que labran, de la lancha,  de la maquinaria,  sino protagonistas del gobierno del lugar que está en edificación permanente, con todas las contradicciones que ello implica.

4.- Sistema popular de producción, procesamiento, distribución y consumo. En el capitalismo la producción y el consumo estan generalmente como procesos separados, así como la contradicción entre capital trabajo, entre la ciudad y el campo, la idea del sistema es superar esas contradicciones, es la complementariedad de los trabajadores, de los comuneros, entonces nos dedicamos a acercar, organizar y planificar cada vez mas, la producción y el consumo.
Basados en la idea de retomar el proyecto histórico truncado con la llegada de Colón en 1498, asumimos re-construirnos, decidir qué comer, cómo vestirnos, qué producir, cómo, bajo qué modo, todo ello nos llevó a repensar la comuna como sintesis del socialismo, como espacio para que construir la "nueva vida", sí en el capitalismo la sintesis o forma elemental es la mercancía, para el socialismo desde la comuna es la empresa de propiedad social la que debe constituir esa forma elemental de trascender la explotación y la apropiación capitalista de la riqueza producida por los trabajadores, la que genere productos para satisfacer necesidades humanas cada vez mas libres de dominación.

 La empresa gran comunal persigue la organización del consumo con la planificación por familia y por supuesto la producción, pero aquí hay algo nuevo que es el amarre de toda la cadena, desde la propiedad hasta el consumo, amarrando socialmente a los productores y consumidores, con la mirada puesta en aumentar la capacidad de producir, por tanto incentivar a nuevas incorporaciones de trabajadores a la producción. Por ejemplo en algunos rubros como el maíz, el café, arroz, cacao, plátanos, cocuy, miel, carnes, stevia, moringa, y productos de limpieza, se tiene desde la propiedad pasando por el procesamiento hasta el consumo.

El sistema aun incipiente genera también relaciones sociales y espirituales que van consolidando el encadenamiento productivo y el enlazamiento humano. Si la comuna tiene control de la producción en su poligonal y mas allá todas las comunas tienen el control de la distribución de aquello que producimos, entonces estaremos cada vez mas libres de especulación, de bachaqueo, de acaparamiento, para ello es necesario afinar la planificación y disponer de una plataforma logística que facilite el almacenamiento y la distribución.

5.-  La ciencia, la tecnología y el conocimiento ancestral para la producción. Comprendiendo que la dependencia del modelo hasta ahora desarrollado en Venezuela tiene que ver en buena medida con el retraso que tenemos en ciencia y tecnología, la tarea que emprendimos fue la creación de una Universidad que pueda generar un nuevo conocimiento donde los saberes ancestrales y científicos se encuentren. Hoy tenemos aulas campesinas comunales en varios estados del país, en este momento nos encontramos haciendo recorridos por precisar las aulas activas.
Es imprescindible que las comunas comiencen con mayor fuerza a procesar los alimentos por ejemplo, a incorporar procesos de industrialización con las consideraciones respectivas, la empresa comunal metalmecánica que tenia unos productos de mayor calidad que los importados, es otro ejemplo de lo que podemos hacer no solo en alimentos, en medicinas, en bienes diversos;  conocemos la experiencia de compañeros que están produciendo aceite comestible de moringa, pero también están haciendo pruebas e investigaciones para producir el aceite para motor de vehículos,  cuando bajo el absoluto desconocimiento nos dicen que no podemos producir, recordamos a un campesino de Mérida que tiene todo el conocimiento para deshidratar el plátano y lo envasa, los compas de Lara que tienen producción de Lejía, un producto de limpieza extraordinario, así podemos nombrar muchos ejemplos de lo que el pueblo está haciendo con ciencia, tecnología y conocimiento ancestral.

6.- Sistema económico-financiero comunal. La experiencia de los bancos comunales.  Nos planteamos crear verdaderos bancos, no simplemente tener una cuenta para que el gobierno deposite recursos después de aprobar las formalidades que se requieren, además de los procesos de cooptación que generalmente supone, entonces, en uno de los encuentros nacionales surgió la idea de generar un sistema económico financiero comenzando por un banco que pudiera tener todos los instrumentos que hoy usan los bancos convencionales, solo que los dueños son los comuneros y comuneras. En ese sentido, se han dado ejercicios de bancos de verdad, donde los comuneros pueden depositar sus ahorros y ya se han otorgado créditos, también vale recordar las cajas rurales que funcionaron  muy bien por Carora y fueron inicio de las comunas en Lara.

7.- El trabajo como proceso social para organizar. En estos diez años de experiencia en conformación de comunas, corredores comunales, ciudades comunales, empresas de propiedad social, valoramos en su justa dimensión el proceso social del trabajo, como proceso de vida que nos hace re-crearnos, generar  elementos para una cultura comunera que son bienes comunes inmateriales. En este recorrido aprendimos de los comuneros de la Sierra de San Luis  que “Es mejor trabajar para organizarse, que organizarse para trabajar”.

8.- Trascender la División internacional de trabajo
. Todo ello implica e indica que debemos trascender con el modo de producción basado en el rentismo petrolero y en el extractivismo, debemos construir una economía de los comuneros, de los trabajadores, en armonía con la naturaleza, preservando al planeta, que rompa con el rol que nos asignaron las grandes potencias en la división internacional del trabajo, donde nos toca cumplir la función subalterna de proveedor de materias primas, por ello creemos en un sistema de comunas, ciudades comunales, enlazamiento de todas las empresas de propiedad comunal, integración de todos los productores comprometidos socialmente, que edifique una economía desde los elementos mencionados, mas otros que seguramente se escapan y nuevos aspectos que surgen en este proceso popular constituyente permanente, derumbando la idea de la economía comunal marginal. Nuestra economía tiene la fuerza del trabajo, de quienes producimos la riqueza, entonces nuestra economía puede y debe ser grande. ¡Trabajadores del Mundo Uníos!

Bibliografia
_Marx, Carlos  El capital. Fondo de cultura económica. Edición en español (1946)
_La Toparquía Comunera, concreción de la utopía (2014). Red Nacional de Comuneras y comuneros.
_Vargas Iraida y Sanoja Mario (2015). La larga marcha hacia la sociedad comunal. Fundación editorial el perro y la rana.
_Harnecker, Marta (2009). Cuentos de Comunas (trabajo inédito).
_Confederación de consejos comunales José Leonardo Chirino. http://rednacionaldecomuneros.blogspot.com/2009/11/confederacion-de-consejos-comunales.html
_Jiménez Lemon, Atenea (2017). Construir el socialismo es avanzar hacia la comunalización. https://www.aporrea.org/ideologia/a207737.html
_jiménez Lemon, Atenea (2017). Para derrotar la guerra económica, Por qué La Comuna.  https://www.aporrea.org/contraloria/a228828.ht